Chinoy: El fuego del dragón
De nuestra co-responsable Marisa Negri:
Es la noche porteña y el festival Chile emergente.
Se apagan las luces y en el escenario aparece un muchachito menudo con su guitarra acústica. Lo que sucederá después, casi tres horas de un show intenso y deslumbrante no se condicen con esa mínima figura que luego saldrá a la calle a fumar un cigarrito con la guitarra ya enfundada como cualquier cabro que sale de una peña.
Chinoy, destella con su primer disco "Que salgan los dragones" (2009). Un puñado de canciones inspiradas y hondamente comprometidas se enlazan con la más pura tradición trovadoresca de Latinoamérica.
Su presencia evidencia esa raíz poética de Chile que está viva en las calles; desde Violeta Parra a Pablo de Rokha, pues Chinoy abreva en una excelente mistura de ambos.
Se declara deudor del punk y de Rimbaud. Brilla su voz y la apasionada ejecución de la guitarra y con eso es suficiente para el arrobamiento general.
Tal vez sea su experiencia de cantautor por los bares del puerto, su registro sensible de un país tan herido por las diferencias sociales e ideológicas, lo cierto es que Chinoy no pasa inadvertido y ha llegado con su verdad mínima, cotidiana, a encender el fuego para todos.
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